Rostizar es mucho más saludable que freír
Para reunir a la familia un domingo y no trabajar mucho, a mí me encanta rotizar; como el pasado domingo cuando mi primo Carlos hizo un delicioso cerdo rostizado a las hierbas, que por cierto le quedó delicioso.
Por ser tan fácil de preparar, toda la familia puede ayudar; unos hacen la mezcla para untar, otros hacen las verduras, también rostizadas, por supuesto; y lo mejor todo, al horno y no hay que ensuciar la estufa.
Por eso, hoy los invito a rostizar.

Es una técnica donde el alimento que se va a cocinar se rodea de aire seco y caliente, la mayoría de las veces este deberá estar cerrado (por ejemplo, forrado con papel aluminio); la temperatura es mucho más alta que el horneado, esto nos ayuda a que los alimentos se doren y caramelicen en la superficie (costra), esto se debe a las mezclas o grasas extras que se le untan al alimento por todos lados en su exterior.
Pero qué tal que te comparto unos pasos para que tengas un muy buen rostizado:
Un buen corte es indispensable; la carne deberá estar jugosa y tierna; un Rib Eye es un corte muy recomendado.
La temperatura deberá ser de aproximadamente de 425-f por los primeros 30 a 40 minutos aproximadamente; esto nos ayudará a desarrollar costra y pasando los 30 minutos, bajamos a 350 o 325-F para el tiempo restante.
Después de esto, es muy importante sacar la carne, envolverla en papel aluminio y dejarla reposar antes de rebanar esto ayudará a que toda la humedad que perdió el corte se distribuya internamente.
